A tu vera 2013: Análisis de la gala 8

Aquí os dejo mi análisis de la octava gala oficial de “A tu vera”. Voy a valorar las 9 actuaciones individuales, las tres corales y los dos retos

Reto inicial: Marceliano VS Raquel: Mi niña Lola

Marceliano: El timbre de voz de este señor conectaba muy bien con el tipo de canción. Tener un color vocal así ayuda mucho a crear atmósfera y sin necesidad de reforzarlo mucho se consigue un buen resultado. El problema es que se trata de una actuación basada únicamente en pasear la voz, sin apoyarse en la expresión facial (media actuación la ha hecho con los ojos cerrados), ni en la gestual (las poses de los brazos resultaban muy superficiales y convencionales, sin reforzar la parte dramática). Me ha faltado cierta actitud, cierta intención, algo más de pasionalidad, de meterse más en la interpretación. Se notaba algo nervioso e inseguro durante la actuación. Lo que sí me han gustado mucho son los giros que ha hecho al tema, esos garganteos tan cálidos y personales, que le daban a la canción un toque muy fresco. Técnicamente a pesar de no tener formación, no ha cometido muchos fallos garrafales. Se puede decir que lo ha resuelto con corrección. Para mí se ha quedado un pelín flojo en interpretación. Le pongo un 5,5.

Raquel: Ha hecho una interpretación muy exquisita del tema, adoptando una actitud muy maternal, muy sentida. Ha estado muy reivindicativa e intensa en las estrofas (con pequeños brochazos de desesperación e impotencia en los “dime lo que tienes”). En los estribillos ha estado muy recogida e intimista. Se ha metido de lleno en la interpretación, se lo ha creído, ha proyectado en todo momento los sentimientos de ese personaje y se ha apoyado de una manera más natural y convincente del aparataje dramático pertinente (gestos, miradas y movimientos). En es sentido ha estado mucho más completa, redonda y matizada que su rival. La voz se ha proyectado y colocado muy bien (muy bien afinada y mejor compenetración con el piano que Marceliano). Le pongo un 8.

Coral: Ay Torre Torremolinos

Yo no la he visto tan desastrosa como la han pintado. Ha habido algunos fallitos técnicos de tempo y de coordinación con la orquesta, pero en general, la canción ha estado bien afinada. Este tipo de tema le iba como anillo al dedo, ya que Coral ha podido darlo todo en la coreografía, muy vistosa y muy bien resuelta. Ha estado muy coqueta, muy juguetona, con gracia. Se le ha notado muy segura, con tablas, disfrutando del momento escénico, vendiendo el tema mediante gestos muy divertidos (sin caer tampoco en la vulgaridad). Ha habido un poquito de irregularidad en las intensidades. No sé si había algún problema de sonido, ya que la voz no se escuchaba muy limpia (algunas veces sonaba entrecortada). La actitud era la que requería el tema, independientemente de que se pueda aprovechar o no un poco más. Por eso le pongo un 7.

Sergio: Ay Maricruz



Uno de los puntos que le quedaban por potenciar a Sergio era la puesta en escena y esta noche creo que lo ha conseguido (y con nota). Me ha encantado la manera de moverse, de mirar a cámara, la coordinación que ha habido con los bailarines, y en general, la buena planta que ha tenido durante la actuación. Es verdad que algunos gestos y detalles resultaban demasiado femeninos (eso en un hombre queda poco estético), pero en general, yo creo que esta noche ha dado un gran paso a la hora de saber moverse en el escenario (moverse en un escenario no es como moverse dando un paseo por el parque). Sin embargo, esta noche Sergio ha fallado en la voz, ensuciando algo también en la interpretación. Una lástima que justo la noche que mejor se mueve en escena, haya tenido esos fallos. Hoy la voz la he notado algo ronca, algo sucia, sin tantos matices. Sergio acostumbra a colorear cada nota, cada terminación, cada final. En cambio, hoy el producto ha quedado algo turbio, algo mate, muy poco personal (y precisamente este tema admite muy bien innovaciones). Ha habido un fallo en la letra y eso le ha hecho perder fuerza toda la segunda parte, donde ha estado más inseguro, más incómodo, con ganas de terminar. La parte dramática ha perdido mucha fuerza y yo me he salido completamente de la atmósfera, ya que Sergio se ha limitado a cantar, dejando de contar en ese preciso momento. Por el esfuerzo escénico, le pongo el 5.

José: La ruiseñora

Hoy José no ha tenido su noche. Uno de sus problemas radica en la expresión facial. En su cara yo no consigo leer la canción, me cuesta mucho entenderla. Por un lado, sus ojos hacen intento de llorar, pero por otro lado sonríe y hace gestos optimistas. Eso crea unas incoherencias, ya que su cara es una mezcla de sensaciones muy desordenadas, creando una masa muy imprecisa, muy vaga, muy indefinida. Eso se soluciona fácilmente: leyendo bien la canción y adoptar unas pautas para desenvolverse en el registro. Algunas partes del tema han quedado muy gritadas, llegando a descontrolar bastante la voz. Ha habido bastantes fallos técnicos (alguna desafinación, falta de sintonía con la orquesta). Incluso en esta actuación ha dejado aflorar esos vicios flamencos de los primeros programas (retardando el dramatismo). Aunque ha habido algunos detalles muy bonitos, en conjunto, me ha faltado darle unidad al tema y sobre todo, dotarlo de evolución. Las estrofas parecían un ciclo idéntico en matices, movimientos, gestos (sin diferenciarlas unas de otras, ni buscar matices diferenciadores). Ha faltado cierta fluidez, cierta continuidad a la hora de dosificar de manera más equilibrada las herramientas del artista (gestos, movimientos, matices vocales). Ha habido un andamiaje, pero sin un edificio claro. Le pongo un 4.

Natalia: Mi Salamanca.

Yo creo que un tema como este es el que le hacía falta a Natalia: un tema donde poder empezar de cero, sin referentes femeninos claros y así poder hacer una versión suya, personal, sin la posibilidad de comparar con nadie. Hacer un tema con versiones mayoritariamente masculinas, ha ayudado muchísimo a que Natalia pueda dar rienda suelta a la creatividad, a poder aportar su huella, sin mimetizar a otros. Por fin puedo decir que Natalia hoy ha dotado a una canción de sellos propios y ha conseguido configurar ese carisma que yo tanto he criticado que le faltaba semanas anteriores. ESTO era exactamente lo que yo quería. Ha estado soberbia. Era un tema dificilísimo que ha bordado en todos sus aspectos (voz, interpretación, puesta en escena). Encima tenía un fandango que ha resuelto francamente bien. Lo ha sentido, ha arriesgado muchísimo, ha matizado como nunca, ha exprimido todas las posibilidades posibles en cuanto a gestos y expresiones faciales. Yo creo que lo ha vivido con mucha pasión y así nos lo ha transmitido a los espectadores. Yo no soy muy partidario de hacerlo, pero le voy a poner un 10 porque por fin ha conseguido hacer una actuación completa en todos los sentidos, con muchísimo sentimiento.

Elena: La flor de los cantes

Me encanta el uso que ha hecho Elena de los bajos en esta actuación. A media voz consigue transmitir mucha dulzura, mucha ternura, con ecos aterciopelados y melosos, ideales para las partes más intimistas y calentitas de este tema. Técnicamente ella sabe graduar muy bien la voz (pasando de los bajos a los altos mediante subidas). Lo que pasa es que cuando hace uso de los agudos, su timbre pierde su encanto, ya que esos agudos deben ir acompañados (al menos en este tema) de fuerza, de garra, de decisión de cierta actitud enérgica. Eso ha sido su fallo: su voz en los altos pierde muchas posibilidades y por eso se ha quedado en un quiero y no puedo. Ha faltado muchísima fuerza, muchísima actitud, mejorar la dinamización del contenido de la copla. Ha habido algún gallito, alguna desafinación esporádica. Yo creo que la puesta en escena (el baile) la ha despistado un poco. Aunque interpretativamente no se puede decir que esté mal, podía haber aprovechado más las posibilidades del tema. Le pongo un 5,5.

Sonia: Maruja Limón

Como buena profesional, Sonia es capaz de afrontar con calidad todo tipo de registros. Es verdad que en los registros más ligeros y desenfadados le falta cierta espontaneidad y naturalidad que sí tiene en los grandes “coplones” y a lo mejor tiene que forzar un poco más la máquina para poder sacar petróleo de los temas y así desmelenarse del todo. Eso hace que a lo mejor no resulte tan fresca en este “Maruja limón” como en semanas anteriores. No obstante, ha estado muy correcta, con una actitud muy bien proyectada, muy alegre, muy pícara, muy pletórica, colocando la voz perfectamente, con fluidez, haciendo un uso brillante de la puesta en escena. Sonia es muy polifacética y cualquier cosa la resuelve muy bien (sea de manera más mecanizada como esta noche o más espontánea). Me ha gustado algunos momentos tan ocurrentes (cuando se levantaba un poco el vestido). Se nota que entiende el tema, lo interioriza y busca siempre la interacción con el receptor, como toda buena profesional, indagando en la “clave” para hacerlo siempre bien. Le pongo un 7,5.

Verónica: Capote de grana y oro

Este tipo de pasodobles le vienen como anillo al dedo a Verónica. Ha sido una actuación muy completa en todos los sentidos. Verónica ha explotado el tema de una manera excelente, indagando en todos los matices posibles que requería (tanto dramáticos como vocales). Si a eso le unimos un portento vocal casi perfecto (proyectando una voz limpia, clara, arriesgando en los garganteos) junto a una puesta en escena muy poderosa (ese vestido le ha ayudado mucho) y una actitud pasional, está claro que el resultado va a ser cercano al sobresaliente. Ha estado más coplera que nunca, sabiendo mantener la atención del espectador, moviéndose de una manera vistosa, pero solemne, con mucha intención, totalmente metida en el contexto, con seguridad, aplomo. A lo mejor no hubiera estado mal meter algún giro más transgresor, algo que le diera algún toquecito más personal (sabiendo que es un tema muy versionado), pero sea comos sea, ha sido su mejor actuación en lo que va de concurso (y eso es indiscutible). Le pongo un 8,5.

Marceliano: La salvaora

Ya dije en su actuación del reto que este señor tiene un timbre muy cálido e inherentemente lírico, ideal para canciones intimistas, que requieren contextos de distancias cortas (susurros, lamentos, elegías, canciones recogidas). Cuando hay que subir la voz, se pierde todo el encanto de golpe. Es una voz a la que le falta potencia y que resulta difícil de modular y de proyectar. Por tanto, habrá que vigilar muy bien el repertorio ya que puede resultar problemática en determinados registros y contextos. Se trata de un problema de versatilidad. Hoy tenía un tema que le iba muy bien y por eso dramáticamente ha sido una actuación óptima. A mí me ha emocionado (sin necesidad de sobrecargar la escena) y me ha transmitido mucho. El problema es que esa voz hay que potenciarla con otras cosas que también son muy importante, ya que esta “Salvaora” se ha quedado algo coja: hay que transmitir con la mirada, con los brazos, moverte, mirar a la cámara, al público. El estatismo en exceso hacer perder lirismo a un tema así. La expresión corporal y la puesta en escena son los dos principales focos que debería trabajar Marceliano. Ha habido problemas de tempo y de coordinación con la orquesta. Algunos giros han quedado muy bonitos y han dado personalidad y color al tema. Hay que pulir todavía muchas cosas. Por eso, aunque la interpretación ha sido notable, le tengo que dar un 6.

Raquel: Poema de mi soledad

Me he alegrado mucho de la vuelta de Raquel al concurso después de la marcha de Lucía. Una voz así no puede perderse. Con Raquel me ha pasado lo mismo que con Natalia: necesitaban una actuación así para poder darlo todo (artística, musical y dramáticamente). De hecho, yo durante las actuaciones suelo tomar notas. En cambio con Raquel (al igual que con Natalia) me han dejado con la boca abierta y me han ganado desde el principio hasta el final (sin apuntar nada, ya que me han atraído a su espacio dramático). Raquel ha hecho una versión muy buena del tema, combinando (de acuerdo con la letra de la canción) las partes recogidas e intimistas, abriéndose poco a poco hasta culminar en las partes más elevadas y altisonantes del tema, con una maestría, señorío y buen gusto. Es un tema complicado (pasar de esos extremos de una manera gradual no lo puedo hacer cualquiera). Hoy Raquel ha sido toda una señora de la copla. Lo ha vivido y lo ha hecho vivir. Por eso, voy a ponerle un 10.

Coral del equipo de Olga: Ten cuidado (Con Natalia)

La mejor coral de la noche (con diferencia). Las dos han estado soberbias. ¿De verdad Natalia ha improvisado sobre la marcha sin haber ensayado antes, después de la salida de Lucía del concurso? Si esto es cierto, felicidades, porque Natalia ha hecho una actuación brillantísima, con una profesionalidad y garra increíbles (como conociera la canción de toda la vida). Me ha encantado su pose escénica, ahí inmóvil, aguantando sin moverse durante la primera parte (mientras Olga cantaba). Ha sido todo una actriz de la copla (no sólo cantante). Las dos se han metidos de lleno en el tema, con muchísima compenetración (vocal y corporal). Esos gestos entre ellas, esas miradas, cómo las dos han mantenido una “conversación”, aprovechando el dúo para enriquecer más la interpretación del tema. La especialidad de Natalia son los agudos y eso se ha notado en la garra, la fuerza, la pasión y el sentimiento que han puesto. Ese divismo de Olga ha servido para meterse de lleno en el contexto, ya que cada “Ten cuidado” sonaba con un eco diferente. Han exprimido todas las posibilidades del tema. Ha habido alguna cosita técnica (pero casi ni se ha notado con el pedazo de interpretación). Un 9,5.

Coral del equipo de María Rubí: Niña Isabel (con Sonia)

Semana a semana este equipo está asentándose buscando depurar los empastes entre las voces y hacer que cada vez suenen más bonitas. Vocalmente han estado muy bien, con quiebros y giros muy personales. La unión de las dos voces era celestial, ya que daba gusto escucharlas. Iban al unísono, como una fusión muy agradable para los oídos. La interpretación ha mantenido perfecta coherencia con la estructura del tema, buscando cierta alegría y gracia en las partes descriptivas y dando pinceladas más dramáticas a las partes más densas (que hablan de las “penas” de esta niña Isabel). El problema es que la actuación ha empezado muy fuerte, con un espíritu y actitud de acorde a la habanera, pero luego se ha desinflado mucho, perdiendo fuelle hasta terminar muy agotadas (dramáticamente hablando). Han soltado todos los ases que tenían en la manga de golpe, de tal manera que a medida que avanzaba el tema iba perdiendo frescura y sorpresa. Han usado los mismos recursos desde el principio hasta el final sin una evolución clara. Eso ha hecho que el espectador pierda atención y haya salido el modo “piloto automático”. Una lástima que esa actitud no se haya mantenido con constancia. Hubiera sido la bomba. Un 6,5 (que podía haber sido mucho más).

Coral del equipo de Jumilla: Cabecita loca (todo el equipo)

Precisamente, un tema como este requiere cierta locura, cierta gracia, cierto desenfreno, desmelenamiento, más alegría, más vidilla en escena, más guasa. En cambio, los he visto muy contenidos a todos, como queriendo ser correctos. Precisamente aquí no hace falta tanta corrección vocal. Me ha faltado más pasión, más ganas, más intención, una actitud muy lúdica. Ha quedado muy descafeinado (a pesar de que ha habido compenetración y química entre los miembros e individualmente cada intervención no era mala). Se podía haber explotado mucho más a nivel vocal. El final con todos a la vez sí me ha gustado y ha quedado muy bonito. Una pena que haya quedado tan apagado todo. Un 5,5.

Reto final: Coral VS Sergio: La bien pagá

Coral: Me ha sorprendido mucho la actuación de Coral. Es verdad que su timbre no le pega a un tema tan intimista como este donde se requiere cierta cercanía e introspección. Sin embargo, se ha peleado todo lo posible para hacer una actuación de calidad, sentida y creíble. Por primera vez la he visto poner intención en la parte gestual y facial, matizando detalles de una manera muy madura y omnisciente con el tema. Cuando lo haces con esa seguridad, significa que te has enterado del contenido de la copla y que has conseguido meterte en la piel del yo lírico. La adecuación (el hecho de que esos matices resulten acertados) puede ser discutible, pero lo que no es discutible es la actitud, intención y dinamización que ha hecho del tema, interiorizándolo a su manera, tal como ella lo siente a su edad. Es verdad que ha faltado más recogimiento en el estribillo para indagar y exprimir más matices, y también ha habido alguna cosita técnica. No obstante, en conjunto, me ha sorprendido mucho la actuación de Coral. Un 7.

Sergio: Esta misma actuación la hizo en la gala 1 de los castings, y el resultado ha sido muy parecido. La introspección, recogimiento e intimismo se ha configurado de una manera más acertada que su rival. Sin embargo, no ha alcanzado la naturalidad y frescura de Coral. Me ha dado la impresión de que a Sergio le ha costado interiorizar y sentir verdaderamente el tema. La expresión facial estaba muy forzada, focalizando la interpretación de una manera demasiado lacrimógena. No lo he visto tan cómodo como la primera vez, ya que ese enfoque tan dramático no permite extraer los matices que tiene el tema. No obstante, vocalmente ha arriesgado mucho más con quejíos y garganteos más efectivos y llamativos. Dramáticamente ha sido correcto, pero no brillante (por todo lo que he dicho). Coral no ha estado tan sentida (el timbre no le iba), pero ha sacado más matices en los detalles. Sergio en conjunto se ha amoldado más con la esencia, pero ha abusado de manera excesiva de lo dramático sin buscar los otros matices que se podían exprimir del tema. Le pongo un 6,5.